Lo mire agobiada, estaba cansada de esta situación, de verlo pero no poder tocarlo, ni sentirlo, ni besarlo. Camine hacia la puerta dispuesta a salir del cuarto y escapar de mis dolidos sentimientos, de amor y desengaño. Pero cuando estaba por marcharme su vos rompió el denso silenció que se había formado y me corto la respiración.
_ por favor... Me suplico
Yo no Quería voltearme, no deseaba perder el control. Así qué me quede parada de espaldas a el, con la mano en el picaporte y la mirada clavada en la puerta.
_no, no puedo... Se me quebró la vos
Escuche como se acercaba hacia mi,dése poder moverme, salir de su alcance. Pero no pude y antes de poder hacer o decir algo, me tomo por la cintura y me volteo hacia el. Su rostro estaba a centímetros del mío. Respirábamos el mismo aire. Serré los ojos y me entregue al momento. A ese preciado momento con el. Comenzó a besarme el cuello y me estremecí. Quería impedírselo pero no podía.
Agudice mi sentidos y pude sentir cada parte de él, el olor sitrico de su perfume, el dulce olor a su champo de canela, el mentolado olor de su aliento y finalmente el suave pero sutil olor de su sudor mezclado con el perfume de su jabón.
Acerco su boca a un costado de mi rostro y susurro junto a mi oreja unas palabras que me decicieron._ te necesito. Dijo, y su aliento junto a mi oído me hizo estremecer de placer.
Recorrió con su boca mi mejilla, hasta que sus labios quedaron posado con delicadeza sobre los míos.
Miro mis ojos y luego mi boca, parecía que me estuviera pidiendo permiso para besarme. Me apretó más las cintura con su brazos y yo envolví mis brazos al rededor de su cuello.
Pd: esto es algo que escribí hace mucho y como últimamente no hando tan inspirada decidí publicarlo
Aver si le justa
_ por favor... Me suplico
Yo no Quería voltearme, no deseaba perder el control. Así qué me quede parada de espaldas a el, con la mano en el picaporte y la mirada clavada en la puerta.
_no, no puedo... Se me quebró la vos
Escuche como se acercaba hacia mi,dése poder moverme, salir de su alcance. Pero no pude y antes de poder hacer o decir algo, me tomo por la cintura y me volteo hacia el. Su rostro estaba a centímetros del mío. Respirábamos el mismo aire. Serré los ojos y me entregue al momento. A ese preciado momento con el. Comenzó a besarme el cuello y me estremecí. Quería impedírselo pero no podía.
Agudice mi sentidos y pude sentir cada parte de él, el olor sitrico de su perfume, el dulce olor a su champo de canela, el mentolado olor de su aliento y finalmente el suave pero sutil olor de su sudor mezclado con el perfume de su jabón.
Acerco su boca a un costado de mi rostro y susurro junto a mi oreja unas palabras que me decicieron._ te necesito. Dijo, y su aliento junto a mi oído me hizo estremecer de placer.
Recorrió con su boca mi mejilla, hasta que sus labios quedaron posado con delicadeza sobre los míos.
Miro mis ojos y luego mi boca, parecía que me estuviera pidiendo permiso para besarme. Me apretó más las cintura con su brazos y yo envolví mis brazos al rededor de su cuello.
Pd: esto es algo que escribí hace mucho y como últimamente no hando tan inspirada decidí publicarlo
Aver si le justa
Es un placer leerte.
ResponderBorrarComo las creaciones de Disney que mencionas, que tanto nos emocionaron y emocionan, sos VOS una personita mágica, capaz de habitar ese "entre", ni adentro ni afuera, espacio intermedio, fantasía y realidad, que solo los niños y soñadores conocen y que tanto anhelamos, y a la vez (y en la misma proporción) olvidamos o relegamos...
Gracias por invitarme a volver un rato.. Te quiero y admiro.
Paz. tu prima.